En internet es posible hallar diferentes formas de hacer extractos de cannabis con fines medicinales. Estos tienen distintos nombre en dependencia del disolvente usado, podemos localizar recetas para preparación de tinturas, aceites, licores, etcétera Aunque los nombres difieren todas y cada una tienen en común que son un concentrado de cannabinoides y se pueden repartir en gotas.
aceite producida por el procedimiento de Rick Simpson
Los aceites de cannabis son las extracciones más populares probablemente debido a Rick Simpson, quien apunta se curó un cáncer a la piel y otras enfermedades con esta clase de extracción. La receta se halla de manera fácil en la red de redes, mas, personalmente desaconsejo su preparación por 2 motivos, el primero es que el procedimiento usa como disolvente Nafta, un derivado de petroleo que deja restos probablemente tóxicos en el aceite final realmente difíciles de quitar y que en consecuencia van a ser ingeridos, conforme Rick las propiedades del aceite son tan potentes que superan los posibles daños de estos restos, prefiero asegurar que no se está administrando ningún tóxico. El segundo motivo es que trabajar con estos disolventes hace el proceso peligroso dado a que los vapores desprendidos son enormemente inflamables, por ende se debe efectuar con mucha cautela, en un lugar ventilado y lejos de cualquier fuente de fuego. Bajo exactamente el mismo procedimiento asimismo está la posibilidad de hacer la extracción con alcohol puro, mas este es costoso y bastante difícil de adquirir. Además de esto asimismo desprende vapores inflamables que hacen el proceso peligroso.
Según una investigación publicado en dos mil trece [1] el aceite de oliva sería de los mejores disolventes para efectuar el aceite de marihuana con objetivo medicinal; completamente desposeído de toxicidad y muy eficiente tanto para la extracción de cannabinoides como de terpenos. Puesto que, siendo una substancia no volátil, evita que los terpenos se evaporen tal y como si sucede con otros disolventes, como nafta o bien etanol.
Para efectuar una extracción con aceite de oliva, es suficiente calentar una mezcla de diez g de cogollos/flores desmenuzadas, sumergidos en cien ml de aceite de oliva a baño maría (a una temperatura inferior a 100°C, es imprescindible supervisar la tº en todo instante) a lo largo de noventa minutos. Entonces, se debe retirar la mezcla del baño maría y calentarla a fuego bajo a más o menos 120°C (comprobando con un termómetro) a lo largo de treinta minutos, para proceder a la descarboxilación de los cannabinoides. Dejar enfriar y filtrar con una lona limpia, filtros de café o bien una máquina de café de presión por poner un ejemplo. Entonces, poner el aceite en envases de vidrio obscuro para una mejor conservación. En esta clase de procedimiento, a través de la aplicación de calor nos aseguramos que la mayoría de los cannabinoides están en su forma activa (ver sección cannabinoides-fitocannabinoides) y que por lo tanto los efectos medicinales van a ser efectivos.
La extracción en aceite de oliva tiene numerosas ventajas equiparando con los otros soluciones, es simple de hacer, sin peligro y conserva una buena parte de cannabinoides y terpenos. Mas, tiene solamente un inconveniente, como no se evapora, no va a ser posible proceder a una reducción de la extracción para concentrarla como de ser posible hacer con el nafta y con el alcohol. Y, en consecuencia, va a haber que consumir una mayor cantidad para tener los efectos deseados.
Existe asimismo una forma más simple todavía y que sería sumergir cogollos desmenuzados en aceite en un bote de vidrio, cerrar y dejar macerar por espacio de 1 a dos meses en un lugar oscuro, ir agitando el bote esperemos a diario. Pasado este periodo filtrar y poner el aceite en envases de vidrio obscuro con gotero para su mejor conservación (es indispensable que la conservación del aceite sea en obscuridad, puesto que la luz degrada el thc). El inconveniente o bien ventaja de este proceso es que al no aplicar calor, no es posible asegurar que todos y cada uno de los cannabinoides están en su forma activa, lo más probable es que haya una mezcla de formas activas y también inactivas, y por esta razón el efecto de este aceite va a ser más suave.
Antiguas tinturas y extractos de cannabis vendidos en farmacias.
Las tinturas de cannabis eran muy usadas como fármaco en el siglo XIX, afirman que hasta la Reina Victoria la tomaba para calmar los dolores menstruales. Las tinturas se efectúan con alcohol como disolvente, se puede usar alcohol de cuarenta por ciento (vodka, agua candente, etcétera o bien un alcohol de vino noventa y seis por ciento siempre y en todo momento de empleo alimenticio (el alcohol que se halla en las farmacias no sirve puesto que tiene aditivos que lo hacen tóxico para el consumo). Para hacer la tintura debemos poner en un bote de cristal flores, rellenar con alcohol y cerrar, preservar en un sitio obscuro dejando macerar a lo largo de 30–40 días, removiendo día tras día o bien lo que resulte posible (que no pase de los cuatro días sin remover), pasados este periodo, filtrar y guardar bajo exactamente las mismas condiciones que se mentaron previamente. En el caso de hacerlo con el alcohol de noventa y seis por ciento se pueden usar treinta gr de cogollos desmenuzados en trescientos ml de alcohol. Asimismo ya antes de envasar se sebe dejar evaporar algo el alcohol para reducir la concentración alcohólica (esto se debe hacer en un lugar ventilado en tanto que los vapores de alcohol son inflamables). Cuanto más se deje evaporar, la tintura va a ser más potente en tanto que los cannabinoides quedasen más concentrados y se usarían menos gotas. Cuando el volumen de la tintura se haya reducida a la mitad ya puede ser empleado. Si el alcohol se deja evaporar por completo al final va a quedar un aceite puro concentrado. Por otra parte, si el proceso se efectúa con alcohol de cuarenta por ciento no es preciso evaporar y puede ser empleado de manera inmediata. En un caso así tampoco es posible asegurar que todos y cada uno de los cannabinoides están en su forma activa.
Todas las extracciones mentadas previamente asimismo pueden ser usadas como tratamiento tópico.
Recordar que la concentración y en consecuencia el efecto de las extracciones dependen de la pluralidad de cannabis usada y del procedimiento de preparación usado. Y que, tanto la temperatura como la luz afectarán la calidad de las extracciones.
*Aviso: Cannabis no se hace responsable por la fabricación y empleo de estas extracciones.
Referencias
1. Romano, L. L., & Hazekamp, A. aceite de cannabis: evaluación química de un nue-vo fármaco derivado del cannabis.
2. Dolça Revolució. Josep Pamies
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